Las joyas de Isabel Alcón

Isabel Alcón, Diseñadora de Joyas

Hace dos años que conocí a Isabel Alcón. Fue una maravillosa casualidad de esas que la vida te regala.

Lo primero que atrajo de ella fue su risa. Una risa sana, feliz, contagiosa y que transmite alegría, energía, muchas ganas de conocerla mas y compartir su vitalidad.

Lo segundo fue su inteligencia, una conversación rica, fluida y llena de mil historias que da gusto oír.

Y lo tercero fue un collar y un anillo que ella llevaba en aquella ocasión. Unas joyas a las que yo no podía quitar ojo y que me cautivaron por su originalidad. Eran completamente diferentes a todo lo que estamos acostumbradas  y absolutamente preciosas.

La verdad es que no recuerdo exactamente el orden de lo primero que me llamó la atención de ella, pero sí que fueron esas tres cosas.

Aquel cumpleaños terminó y cada una seguimos nuestro camino. Muchas veces recordé aquellas joyas y aquellas risas compartidas.

Y el destino, que muchas veces nos juega muy buenas pasadas, hizo que hace unos meses volviéramos a encontrarnos. De nuevo fue su risa lo que me hizo girarme y preguntarle: ¿Isabel? Ni su risa, ni su simpatía, ni su estilo tan personal y atractivo habían cambiado nada en estos dos años.

¡Qué alegría de reencuentro! Charlamos durante horas y esta vez sí nos propusimos no perdernos la pista. Y así ha sido, mantenemos un contacto cercano que para mi es enriquecedor.

Anillo Isabel Alcón

Ahora sí sé mucho más sobre ella y sus joyas. Isabel es diseñadora de joyas con mayúsculas. Es Diplomada en gemología por el Centro Europeo de Gemología y Joyería de Madrid. Su vocación viene desde bien chiquita y se ha formado y especializado trabajando muy duro. Muchos cursos, seminarios, horas de estudio, lectura y muchísimo trabajo relacionado con la fabricación artesanal de joyas es lo que han hecho de ella alguien único en este mundo.

Viaja alrededor del mundo, visitando ferias donde encuentra las piedras talladas más especiales. Me ha contado que las ferias en Alemania son las que más le gustan.  Allí encuentra verdaderas piezas únicas. Isabel no va buscando nada en concreto. Pasea, mira, pregunta y sobre todo siente. Y de repente una piedra le llama, se siente atraída por ella y poco más que entre ellas comienzan a hablar. Empieza a imaginar en su cabeza qué va a ser: unos pendientes, un anillo, un collar… es la piedra la que le hace sentir qué llegará a ser. En ese momento ha empezado su labor de creación y ya le falta tiempo para llegar a su taller y ponerse a trabajar.

Por eso las colecciones de joyas de Isabel Alcón son auténticas ediciónes limitadas. Y creo que fue eso lo que a mí me cautivó hace dos años, nunca había visto joyas iguales. Creatividad, imaginación, estilo, profesionalidad, originalidad es lo que yo veo en cada una de sus creaciones.  Ese collar o ese anillo que sabes que  va a ser el centro de atención y va a atraer todas las miradas.

Collar Isabel Alcón

El reconocimiento de los grandes la avalan: Premio del Concurso de diseño de joyas ANGemAwards, sus joyas han desfilado en Cibeles con Elio Bernahayer y otros muchos premios que, la verdad, ahora no recuerdo.

Llevar un Isabel Alcón a mí me llena de orgullo por varios motivos: diseños innovadores y españoles, un gusto exquisito y único, y además es mi amiga.

Sus colecciones se pueden encontrar en diferentes tiendas, una de ellas  Boro Mare, es una de mis tiendas favoritas donde siempre encuentro cosas para regalar y regalarme maravillosas.

También y sobre todo para «ocasiones» especiales recomiendo contactar directamente con Isabel, a ella le encanta aconsejar, sugerir y diseñar exclusivamente para ti.

Para mí es importante que ninguna de sus piezas pesa. Y aunque por su apariencia pueden transmitir esa sensación son livianas y comodísimas de llevar. Si una joya es excesivamente pesada, se convierte en incómoda y se va quedando en el cajón de las olvidadas, os aseguro por experiencia que este no es el caso.

Mercadillo Chic Isabel Alcón